Mientras los ojos, de todo el planeta fútbol, están puestos en Sudáfrica; en Boca se viven horas de definición.
Luego de una gira por el norte del continente que dejó un sabor algo más que amargo en cuanto a lo futbolístico pero sirvió para acrecentar las arcas del club, Boca Juniors va dandole forma a su modelo Apertura 2010.
Ahora bien, vamos por parte, mientras que el tito Pompei va dejando de lado de ser técnico de la primera de Boca o de formar parte de un posible cuerpo técnico de un imposible Carlos Bianchi D. T.; el bichi Borghi va preparando sus valijas para arribar de sus vacaciones, las cuales transcurrieron en el país trasandino. De esta manera Amor Ameal y compañía delimitaron, hace ya algunas semanas, quien piloteará la máquina último modelo que se está diseñando. Si nos remitimos a los antecendentes inmediatos, y a los no tanto, podemos inferir que el bichi parará tacticamente a Boca con un 3-5-2; un Boca que no jugaba con tres defensores desde que el maestro Tabarez lo dirigiría táctica y tecnicamente.
El primer problema a resolver es el arquero, puesto difícil si los hay. Javier Garcia es un potencial buen arquero pero Boca no puede ni tiene que esperarlo, la urgencia de resultados positivos así lo amerita. Es por eso que ya comenzaron a zonar algunos nombres entre los cuales se encuentran Fabián Assman (no vendría mal un superheroe para el equipo), Cristian Luchetti y quien parecería estar ya casi abrochado Hilario Navarro (que no es Montoya).
En cuanto a la defensa se hará borrón y cuenta nueva. Al ya incorporado Insaurralde se sumarían Paolo Goltz (actualmente en Huracán) Matias Caruzzo, éste último conocido por el técnico. De esta manera queda definida la ya anunciada hace tiempo salida de Gabriel Paletta y quedarían relegados en la carrera por un puesto Muñoz, el colombiano Bonilla y el recién vuelto de España Roncaglia.
En el mediocampo, bien abierto por la derecha, jugaría Clemente Rodriguez (otra de las posibles futuras incorporaciones), aunque hay fuertes rumores que un equipo francés tiró una oferta muy jugosa, casi irresistible, para contar con sus servicios. En el caso de que Clemente comparta equipo con lavandina Berggessio, ese lugar sería ocupado por Hugo Benjamín Ibarra, uno de los históricos del plantel, de quien se duda que esté física y futbolísticamente apto para lo que requiere el D. T. de un jugador en esa posición de la cancha. El doble cinco clásico utilizado por el ex director técnico de Independiente y Argentinos Juniors (en Argentina), sin duda estaría integrado por Sebastián Battaglia y Jesus Méndez. El enlace sería J. R., ¿Julio Ricardo? ¿Juan Ramón? No señores, Juan Roman Riquelme, siempre y cuando le renueven el contrato; hecho que espera con ansias todo la parcialidad boquense. Es sabido por estas horas que Riquelme estará ausente hasta la mitad del torneo a causa de la recuperación de una lesión, por lo que ya comenzaron a escucharse nombres para suplir su magia. Lo más cercano y posible es la vuelta de Leo Díaz de la Católica, lo que se ansía es la vuelta al fútbol argentino del ex velez y actual Villarreal Damián Escudero y lo que se sueña el payasito Aimar.
La delantera no saldría de Pablo Mouche y el goleador histórico Martín Palermo, eso sí, siempre y cuando renueven con el titán quien recibió una tentadora oferta del Inter de Porto Alegre. Viatri y el chico Blandi serían las alternativas que tendría el bichi ante la escacés de goles.
Es así que Boca va va dandole forma a su futuro. En lo inmediato deberá afrontar una gira por Australia, y esperemos que ésta no sea positiva solo en lo económico, ¿no?.
